El pesimismo de Arturo Schopenhauer.

Estaba yo pensando el otro día que, trabajando sobre corrientes y movimientos filosóficos y artísticos, se aprende mucho. No me refiero a cómo tenían que ser las cosas sino a cómo debía de ser la sociedad. Sé que se generaliza, pero me flipa como aparecen grupos de locos y locos que andan solos. Entonces es cuando cavilo, cómo nos agruparán de aquí a doscientos, o quinientos años. De verdad que no sé cómo describir la agonía que me produce no saber qué somos y no poder saberlo jamás. Siempre viviendo de la apariencia, siempre viviendo del pasado. Eso sí, con la heroína de las TIC. Lo cierto es que el ahora quizás parezca una mierda pero, ¿quién dice que para Schopenhauer no lo fuese? probablemente, así fuera.